La manada +18

El la dejo hacer, al principio se querian cuidar, mantener en esa rienda, o eso decia, pero la respiracion, la verga dura en el rostro de ella mientras limpiaba y seguia lamiendo, la excitacion de los dos... Fue entonces cuando la tomo por los brazos levantandola y sacandola del agua, en ese momento realmente la llevo a la roca y la levanto para dejarla ahi, el sexo de la canina mujer quedaba a la altura de su rostro y no pidio permiso para abrir las piernas de ella, antes de que se diese cuenta el estaba lamiendo su sexo, acariciando con sus dedos tanto su interior como la entrada a su trasero, aunque esto era solo con afan de calentarla aun mas mientras que su lengua se dedicaba a jugar con el clitoris de ella y de golpe, sin preguntar metio dos dedos en su interior ya humedo, por el agua quizas, o porque ella tambien queria realmente aquello.

- ¿Te gusto lo que probaste? Hay mucho mas...

Fue todo lo que dijo mirandola desde esa posicion mientras que su lengua volvia una vez mas a jugar con su clitoris y sus dedos se hundian sin querer dejarla contestar, queriendo provocarla mientras que su verga seguia dura bajo el agua, quizas incluso mas grande debido a la anotomia de ellos... a veces podia ser un hibrido para que nada se desperdiciase si se daba la situacion...

Quizás lo había de forma intencional el mantener la mirada en la suya. Al principio no había querido mirarle a los ojos, no se solía hacer eso con altos cargos pero la situación... el momento, sus permisos..

La situación le llevó a tomarla y subirla a la roca con una ligereza tremenda. Sentir esos fuertes brazos, el contacto de su piel ¡Ah! Ardía, la piel le ardía aunque no hubiese sol y la luna los bañase de forma fría.

Se quedó semi recostada en la roca así como la dejó él, apoyando los antebrazos y al sentir como su lengua le acariciaba su sexo soltó un suspiro. Se sentía delicioso. Húmedo, cálido, suave. Quería que siguiese frotando su lengua allí. No pudo evitar removersel igeramente buscando más contacto.

Entonces la habló pero no llegó a contestar porque sus palabras se ahogaron en el momento exacto en el que le introdujo los dedos. Se recostó al completo en la roca adaptandose a su forma y le dejó lamer, tocar y meter ¡Se deshacía de placer, allí acostada a su merced. Era un privilegio y sobre todo un gozo.

Continuo de aquella manera, dedicandose a su sexo, de aquella manera espectante, dedicada, mientras la hacia gemir y suspirar, la luna estaba alta pero no podian decir nada a nadie en general, los arboles eran silenciosos, el viento confidente se llevaba los suspiros para esconderlos y la luna solo miraba lo que hacian en ese instante. Fue entonces que no se contuvo, la tomo nuevamente, la bajo a su altura para verla a los ojos antes de que notase su miembro, duro totalmente en la entrada de su sexo y esta vez no pregunto, no espero aprobacion y comenzo a bajar abriendose paso en su interior, estaba grande pero lo hacia despacio, quizas llegase antes de tiempo mas profundo de lo que deberia pero... bueno eso era normal, quizas a veces por eso las hembras eran mas hambrientas de sexo que los machos incluso...

- Sera nuestra primavera.

Dijo antes de terminar de meterla del todo, dejandola alli... palpitante, dejando que notase en la entrada de su sexo no solo eso sino el nudo, aquel que cuando el macho iba a terminar metia igualmente en la hembra para rellenarla por completo... espero un poco dentro del agua antes de volver a levantarla y darla un senton de nuevo sobre su verga, casi divertido, jugueton, la primera habia sido despacio pero la segunda, mojada como estaba y ya habiendo entrado... habia sido natural.

No creía poder mojarse más de lo que estaba. Si que había hecho un buen trabajo dilatandola y enloqueciendola. Tenía los pezones tan duros y parados que lo poco de tela que se le adhería a la piel mojada no parecía más que una segunda piel traslucida y blanquecina. Su larga cola peluda se sacudía inquieta. No tuvo tiempo siquiera de reprochar, de negarse. La metió dentro de tal forma que si bien podría llegar a ser suave en comparación a la segunda vez que se la metió, había visto ligeramente las estrellas. Pero el dolor había sido instantaneo. El sentirle dentro, hinchado y a punto de reventar, en su estrecho interior tan caliente y palpitante era el paraíso.
Ahora comprendía por que añoraban tanto las primaveras, por qué estaban todos tan revolucionados. No, no podían decir que habían hecho aquello y esperaba que nada los delatase antes de tiempo pero no importaba. No podía pensar en otra cosa que en esa verga palpitante en su interior. Daba igual, que hiciese lo que quisiese con ella pero que no se detuviese. Quería sentir ese nudo también en su interior. Se presionó y hambrienta acercó sus labios a los suyos. Esta vez, fue ella la invasiva. -Metela hastael fondo, lo quiero todo dentro de mi.- Estaba caliente a más no poder. En celo.

La agarro el trasero, el agua hacia los movimientos mas faciles y restaba peso, aunque ella ya de por si era una plumita, podia notar como su verga entraba en ella empujo un poco para que notase el nudo a punto de querer entrar pero entonces la subio y comenzo a moverla y moverse, estando acorralada contra la pared y al hablar de aquella manera sus labios se unieron a los de ella entre gemidos y jadeos mientras que entraba y salia, entraba y salia llenandola palpitandola en su interior mientras que liquido preseminal se soltaba ya dentro de ella sin compasion mojandola todavia mas.

- La primavera llega antes y a ti te toca la primera racion y las siguientes...

Añadio mientras seguia de aquella manera, sus labios se separaron de los de ella buscando su cuello, mordiendo, la miendo, jugando en su oreja mientras que se provocaba y ella notaba como su verga se hinchaba en su interior penetrandola cada vez con embestidas rapidas y cortas otras separandose despacio antes de darla una fuerte estocada, alterando los ritmos de las embestidas.

No esperaba que la besase, no así. Tampoco que dijese que las próximas primaveras también serían repetirían. Que la hubiese elegido aún incluso antes de tiempo ya era todo un privilegio. Y aunque podría decirse lo mismo de cualquiera de los de su tipo, él era sin lugar a dudas mucho más atractivo, más... interesante.
Entonces mientras seguía enmbistiendo y penetrando tan profundo como se pudiese sin meter el nudo, sintiendo pequeñas raciones de liquido derramandose en su interior, mezclandose con sus propios fluidos, tuvo la boca libre para hablar.

-Pues tendrás que confirmarlo cuando llegue realmente la primavera y elegirme... y las siguientes... y las siguientes...-

Podían ser palabras muy bonitas pero quizás las decía por lo caliente del momento. Aún así, deseaba creer que así sería. Se sonrió y dejó que los gemidos escapasen tan fuertes como quisiesen salir de su gargant ¡Ah, que loca la tenía!
Se aferró tan fuerte como pudo y ella también le dejó un par de surcos rojos marcados. Superficiales y para nada como los suyos, pero eran un algo. Esperaba no se enfadase pero había sido un instinto, una reacción. Sentía que iba a reventar.

Los intervalos con los que jugaba con el ritmo de sus embestidas, metiendola más profundo, menos.. más... los susurros en la oreja, la respiración, las caricias de su lengua. Le hacían desear hablarle sucio, rogar.- si hubiese sabido que así se sentían las primaveras.... - si, si lo hubiese sabido seguro hubiese intentando provocarle con anterioridad. Ahora no se sentía capaz de no tontearle cada vez que pudiese, tal como había visto que muchas lobunas hacían para mantener el interés de los machos. Manteniendoles al limite hasta que la primavera llegase o que las cogiesen a la fuerza. Cosa que estaba penada si te pescaban o si dejabas en cinta a alguien pero él tenía privilegios y tampoco tenían por que pensar que tendrían mala suerte.

- Tranquila pequeña, lo tomaras cada primavera y mordere a quien intente hacerse con esto...

Dijo al tiempo que metia dos dedos en su boca mientras seguia con aquellos movimientos penetrandola, la apoyo contra la roca al tiempo que la sujetaba y podia dejar que viese lo que hacia.

- Mira lo llenita que quedas y como la quieres... Te querias resistir...

La saco casi por completo dejando que tan solo la punta quedase encarada, metiendola despues mas despacio, el temblaba tambien al hacerlo, suspiraba mientras se producia esa satisfaccion cuando su nudo tocaba el sexo de ella.

- ¿Vas a poder tomarlo todo?

Jugaba a provocarla, a tocar su orgullo, a ver lo que hacia, saco los dedos de su boca y la agarro del cuello sosteniendola, acortandola un poco el aire para penetrarla aun mas duro, mas fuerte y rapido queriendo que contestase mientras la tenia asi agarrada.

Su respuesta la arrancó una sonrisa de medio lado. Quizás sintiendo algo de su orgullo inflarse. Le gustaba imaginarselo así como lo describía.

recibió sus dedos invasivos y su lengua se enroscó en torno a ellos lubricandolos, lamiendolos y saboreandolos. Sentía su propio gusto de cuando la había penetrado con ellos. Aún había un rastro.

Esta vez por orgullo no le respondió pero sus expresiones hablaban solas. Aún así quería quebrarla y lo pudo notar cuando le hizo desearle aún más, cuando la tomó por el cuello quitandole el aire y tomando todo el absoluto control. Si, claramente la doblegaba. Aún a ella... la más arisca de la manada.

-Tengo que... lo quiero.- Dijo con toda la dificultad del mundo a causa del ahogo. Le faltaba el aire pero se sentía tan excitada. Jadeó intentando respirar un poco mientras que su pene se abría camino nuevamente en su interior.
Y ella no podía dejar de moverse, de resfregarse y suplicar también con su propio cuerpo y la presión que entrase hasta el fondo y con todo lo que le habían dotado.

Entonces sonrio, sonrio al escucharla, se quedo asi quieto empujando, su miembro palpitaba en ella, se hinchaba, se notaba que estaba caliente, dejo el nudo a la entrada de ella y empujo, era su primera vez tomando el de el al menos, y quizas solo necesitaria tiempo para que se acostumbrarse a su forma y moldearla, pero empujo despacio, abriendose camino hasta que de golpe al llegar a la mitad del nudo... se metio de golpe, la parte dificil habia pasado y cuando el nudo entro en ella por completa el temblo...

- Si... ah...

Suspiro en el momento en el que ella notaba que bombeaba en su interior descargandose, poco a poco, llenandola, era mas que antes inclusive, habian jugado antes pero ahora era como que era el plato principal y lo anterior un entrante, temblaba y temblaba, palpitaba y su semilla no dejaba de llenarla y nada escapaba de su interior, se inclino hacia adelante entre gemidos y suspiros para atraerla y besarla mientras que seguia llenando su interior sin parar en ningun instante.

Sintió como su vagina se estiraba a duras penas con los empujones que daba aquel enorme nudo para meterse en su interior. Hasta que finalmente desapareció en su interior, atascandose como si estuviese hecho para quedarse allí dentro ¡Dios... ojalá que luego lo pudiese sacar! Pero ahora no quería que lo sacase. Mentiría si dijese que no había dolído. Había sido el primero en toda su vida pero se sentía tan rico ahora.. tan... llena.

Sentía como la llenaba, como se volcaba en ella a modo de cascada sin detenerse.
Buscó sus labios cuando se inclinó sobre ella y elevó un poco las piernas presionando su costado. Sentía el vientre ligeramente hinchandose de tanto líquido y se sentía... se sentía maravillosa. Buscó su lengua y le besó de forma desenfrenada. Salvaje. Podía sentir curiosamente como se le afilaban un poco las uñas cosa que nunca antes le había sucedido.

Se quedo asi por unos momentos notando como de alguna manera ella era receptiva como su lengua se mezclaba con la de ella mientras que su verga hinchada la abotonaba sin dejar de sacar y verter en ella su semilla... Entre gemidos las palpitaciones empezaron a bajar asi como el flujo de su semilla pero no por ello se separo ya que además de no querer el nudo se lo impedia. Su musculatura se hincho un poco para afianzarla mientras la observo al separarse.

- te ha... Gustado?

Dijo temblando y soltando una nueva descarga en ella... Aunque realmente creia que si la sacaba se tentaria de montarla de nuevo... O habia sido él el montado?

Iba a contestar que si que le había gustado pero la nueva descarga en su interior la hizo soltar un gemido en lugar de palabras. Bueno.. ¿Eso respondía a su pregunta no?
El pecho subía y bajaba agitado y se sentía sumamente febril. La piel tenía ese brillo perlado del sudor aunque también el agua había hecho que su piel se mantuviese húmeda.

Le dio un poco de temor que llegase el momento de que fuese a sacar el nudo de su interior ¿Dolería? ¿Saldría? Ni modos que se quedasen así par siempre aunque.. no deseaba que lo sacase. Deseaba que eso se repitiese seguido.

Le contempló volviendo a levantar la mirada y clavandola en sus ojos. Eran profundos, imponentes. Sonrió de medio lado intentando hacerse la fuerte cuando en realidad él la dominaba completamente. Almenos en aquella posición.

Quizás en otra oportunidad pudiese jugar a hacerse desear un poco pero ahora... ahora era suya completamente y estaba acorradalada en todo sentido. En cuerpo y espíritu.

Si seguían así, iban a terminar regresando a casa al amanecer y notarían la ausencia de ambos. Aún tenían tiempo pero parecía que ninguno de los dos tenía muchas ganas de terminar con el tema.

-Y a ti?.-

Entonces el tiro hacia fuera sorprendentemente el nudo no dolio al salir para nada fue como algo rapido a pesar de que parte de sus jugos saliesen de ella volvio a embestirla metiendo el nudo y soltando un fuerte suspiro y gemido pero lo sorprendente es que cuando hizo aquello es que ella pudo notar un fuerte disparo de su semilla volviendo a invadirla y a descargar mas de lo que habia salido al sacarla suspirando entre palpitaciones...

- tu... Que... Pie..piensas...

Añadio antes de volver a empezar con rapidas y fuertes descargas en su interior mientras la miraba a los ojos suspirando de placer...

-Ahhh!!!.- Gimió entre mezcla de gemido y gritito ahogado cuando volvió a meterlo dentro. Podía sentir el líquido chorreando por sus muslos y como el mismo no había terminado de salir del todo cuando ya se la estaba metiendo nuevamente y expulsando una nueva candidad de aquello. Dios... eso estaba complicado y encima estaba tan caliente que no podía pensar con claridad. Estaba hecho... y sería lo que sería. Ahora no veía caso detenerse. Volvió a gemir y se retorció arqueando la espalda. Buscando aferrarse como podía mientras el cuerpo le temblaba.

Claramente no era la única que lo disfrutaba. Se sentía en celo, literalmente. Excitada y completamente hirviendo. Posiblemente después de aquello estuviese caliente por días y eso si que se iba a notar.