Receso [Malkav]

-Por mi esta bien mientras nos regresemos con el tiempo suficiente para poder adecentarnos. De últimas ustedes pueden quedarse bebiendo y yo me regreso antes cuando terminemos con las compras.-

La verdad es que no pensaba maquillarse por demás, pero si pensaba ponerse un vestido bonito. Había escuchado en los pasillos mas o menos el atuendo que estaban planeando algunas y si bien posiblemente variasen entre vestidos muy salvajes o muy elegantes, ella pensaba ponerse algo intermedio. Mundano pero que en cierta forma fuese revelador. De encaje y transparencias pero con tela de color carne debajo para que no se viese nada demas. Quizás algo que le diese un aire a cruza entre fata y Drydaia con una tendencia por lo mundano. Tenía un vestido en específico en mente de los que había en el fondo de su baúl. Quizás...

Observó a la pixie por un momento.

-¿Rowen, te importaría que me lleve a pixie un instante? Quisiera consultarla algo..-

No entendía el dialecto de la bicha, pero por lo menos ella le entendía y bastaría con algún gesto de "si" o "no".

-¿Me acompañas?

Preguntó al hadita caminando en dirección a su propio baúl. Sacó del mismo algo que parecía tela y lo hizo un bollo llevandoselo consigo hacia el baño.

Rowen no entendia nada pero hablo unas palabras levemente y por lo bajo, que pudieron entenderse aunque a oidos de los demas eran meros balbuceos. Entonces la pixie asintio y se encogio de hombros al mismo tiempo como diciendo "como quiera y si" a la vez.

- Va detras de ti.

Malkav apoyo su mano en el menton y observo como se iban las dos "mujeres" tras los biombos y a los cuartos.

- Y tu dices que podria desafiar a tu pareja, pero ¿quien es? tanto que presumes y guardas el secreto.

Olaff se ruborizo un poco seguro que estaria pensando en el baile mientras que el bueno de Rowen no tuvo ningun problema. Muchos de los que acudirian serian espiritistas o demonologistas mientras que otros simplemente serian un tema completamente a parte ellos simplemente iban consigo mismos y la mayoria quedarian embelesados por otros. Entre espiritistas el baile era un cortejo donde espiritus e invocadores charlaban y tonteaban.

No le contestó, simplemente se fue. Una vez en los baños, estiró el vestido y se lo enseñó a la pixie. Estaba hecho con delicado encaje y un forro color piel por dentro que no parecía tela sino parte de su carne.

-¿Te gusta? ¿Crees que sería apropiado?.-

Quizás si compartía con la pixie un poco más, habría un poco más de confianza entre ellas. La verdad es que era con la que menos se había relacionado del grupo y no dejaba de ser una parte del mismo por más que no la tuviesen demasiado en cuenta salvo Rowen. Quizás era tiempo de incluirla un poco más.

-No se si tendrás pensado que ponerte tú, pero si no, quizás pueda confeccionarte algo. No soy la mejor de lo mejor en costura pero algo se y creo que podría recortar algo de la tela de mi ropa para hacerte algo bonito si quieres.-

Había un espejo mágico en la pared. Un poco perturbador... pero un espejo al fin. A veces parecía que el reflejo hacía lo que se le daba la gana. Se puso el vestido por delante para hacerse a una idea de como quedaría. Se lo había probado una vez, hacía bastante y nunca había tenido ocasión de usarlo.

El muchacho puso morros ya que habia sido completamente ignorado, pero los chicos mientras que ellas se iban a hacer sus cosas rapidamente sacaron un juego de mesa, no sabia exactamente como era pero estaba compuesto por chacales blancos y negros que intentaban ganar terreno al otro.

- Creo que no debiste mover ahi.

- Yo creo que si.

- ¿Pero ahi no dejas abierto el flanco izquierdo?

Malkav sonrio mientras que Rowen se daba cuenta de su error mientras que olaff hablaba tranquilamente del asunto como si realmente no hubiese dicho nada salido de tema. Al poco rato Rowen estaba comiendose las uñas intentando averiguar como salir del lio en el que el mismo se habia metido.


Mientras la pixie observaba, cuando le pregunto que iba a llevar alzo los brazos mientras que hacia una reverencia como si tuviese un vestido. Sin lugar a dudas llevaria uno, pero no sabia muy bien cual o como expresarse para la muchacha que cuando le enseño su propio vestido quedo mirandola y se movio rapidamente haciendo una raja de abajo hasta medio muslo de un lado. Aunque parecia deliberada destruccion la pixie sonrio mirandola haciendola gesto mostrando la pierna.

-Oh.. ya entiendo. Así.- Dijo la muchacha enseñando que su VESTIDO también tenía un tajo que iba del muslo hasta el piso.

No era de lo más descocado que se le habría ocurrido que pudiese ponerse el hada ya que anteriormente en el baño, se había metido al agua con ellos practicamente desnuda a excepción de la parte de abajo. Parecía ser que sus alas se habían recuperado correctamente.

-¿No te gustaría esta a escala con Rowen por una noche? Estoy segura que podríamos hacerte crecer bastante en cuanto a altura.

Sacó un pequeño frasquito y se lo dio. Era diminuto, como si estuviese destinado a una muñeca. Le gustaba coleccionar pociones y si bien podría haberla invertido en alguna misión, quizás a la pequeña le podría hacer ilusión el poder tontearle a Rowen a una nueva escala y quien sabe que más.

-Quedatelo y ya eliges tu si usarlo o no. Hay suficiente para un par de veces.-

Volvió a enrrollar el vestido para llevarlo de regreso al baúl. Los chicos parecían ya en medio de otra pelea dramática. Cerró las cortinas de su cama y se cambió en el interior de la misma poniendose algo más cómodo para dormir. Una blusa y la ropa interior inferior que quedaba escondida por la tela del remerón. Volvió a abrir las cortinas y les observó desde la cama.

-¿Quién ganó el juego?

Los chicos al final terminaron por ceder al cansancio, si bien estaban a gusto consigo mismos uno mas decaido que otro si que preferian mantenerse cercanos y con horarios similares. Rowen se metio en la cama al escuchar la pregunta mientras que Malkav simplemente sonrio.

- Digamos que Rowen no estaba plenamente centrado.

Dijo Olaff al tiempo que se dejaba caer en la cama. Sorprendentemente el muchacho ya no se sonrojaba al dirigirle la palabra a Aria y claramente preferia poder hacerlo de aquella manera en la que podria ser mas natural y de forma en la que podria charlar de absolutamente todo.

- Mañana nos espera un largo dia, solo espero que no haya carteristas como los que nos encontramos la primera vez al conocerte.

Dijo recordando a los dos profesores que habian tenido.

- Ademas no tenemos que perder la forma, conseguir ser un linaje no significa serlo pro siempre. Cada principio de año hay un examen para aquellos que permanecen para seguir conservando la insignia de linaje

-Si, me he enterado de eso. Ustedes tienen más antiguedad aquí... espero que realmente no me salgan tan mal los examenes como para tener que regresarme a casa.-

No la apetecía demasiado la vida de cazadora. De asaltar planos, de cazar a los que visitaban el mundo material. Le parecía más entretenido poder ser una infiltrada. Estaba el tema de pasar los informes pero quizás pudiese pasar cosas no tan relevantes... en fin. Por algo la directora había decidido admitirla en aquella escuela a pesar de ser humana, manteniendo incluso en secretismo su raza.

Dejó caer la cabeza contra la almohada cerrando los ojos, no sin antes levantarse una vez más a por la piedra. La guardo cosa de no olvidarsela al día siguiente ya que estaba decidida a hacerse un collar con aquella pieza. También tendría que encontrar un momento para pagar las hierbas que no había llegado a pagar más que con empeñar uno de sus aros de plata. Si podía lo recuperaría.

-Mañana será un buen día. Los he extrañado un poquito el día de hoy.- Admitió con una suave sonrisa y algo de somnoliencia. El sueño no tardó en llegar.

La noche paso mas o menos aunque aproximadamente a eso de las 5 de la mañana antes de que el sol saliese al antojo de la susodicha ama del plano y señora de la torre y del castillo, en el pecho de Aria algo empezo a dar calor, aumentando poco a poco hasta casi convertirse en algo lacerante. El relicario que traia con ella y que nunca se quitaba ardia, casi como si fuese una llamada y realmente es lo que era. Cuando atendio en algun lugar seguro escucho una voz familiar.

- Has tardado mucho en comunicarte. ¿Como estan las cosas por alli? ¿Que has averiguado?

La voz de su padre. Fria y autoritaria como lo era siempre estaba sonando. Si que era verdad que habia sido enviada como infiltrada y como tal debia comportarse. No era mas que una herramienta mas adiestrada desde pequeña como tantos otros cazadores para cumplir una mision.

- Espero que no has hayas estado holgazaneando, recuerda que la "escuela" no es mas que una excusa para que nos lleves hasta esos sucios sobrenaturales y erradicar del todo el problema.

Sentía sudor frío recorrer su frente. Se había despertado sobresaltada y había sido una experiencia dura el encontrar un sitio donde no la pudiesen oir. De hecho, no se sentía segura hablando dentro de aquel castillo.

-A penas han pasado unos días. Aquí es muy duro conservar los puestos y ganarse la confianza de la gente, he estado... ocupada en eso ¿O prefieres me regresen por no poder integrarme y cooperar con el equipo que me asignaron?.-

Por supuesto que no iba a traer a los cazadores al plano Temporalis. Era francamente imposible ya que quien no tenía un pase dado por la directora, no pasaba. Había que estar autorizado y nunca iban a autorizar a toda una jauría de cazadores a penetrar en el plano. No. Como mucho Kendal podría pedirla acceso a otros planos o llevar a los sobrenaturales al Material. O datos de los mismos... pero de ahí a llegar a Temporalis... no.

-Me asignaron a un linaje. Es una especie de grupo cooperativo que crece en conjunto pero del cual pueden erradicarte si te conviertes en un estorbo o no estás a la medida. Se supone que cumpliendo ciertas misiones se acumulan puntos grupales al igual que al dar ciertos examenes y pruebas se acumulan puntos individuales. Dependiendo el grado de puntajes, misiones terminadas, posicion del linaje y relaciones sociales... se tiene acceso a mayor información.-

Evitó decir nada muy relevante, salvo lo que era de conocimiento público para cualquier planar que estuviese inscripto en aquella escuela. Para Kendal sería algo nuevo. Podría decirle quizás algo sobre como se organizaban o movían las cosas y quizás así no tuviese que decir mucho más de la cuenta.

-Todos son muy reservados, más que tú. Sacarles palabras que valgan la pena cuesta más de la cuenta.-

Detestaba que la hablase en ese tono exigente y frío, como si solo fuese una cosa más del montón. Hubo un tiempo en el que se portaba mucho más cariñoso con ella. Pero desde hacía unos meses, desde que la habían asignado la misión... se estaba portando cada vez más duro y distante.

El hombre escucho claramente las palabras de la chica, sin lugar a dudas eran datos nuevos que servirian a futuro para poder catalogar a los sobrenaturales. Ellos se catalogarian en base a su poder y ellos los pondrian en un rango de peligrosidad.

- Esta bien, es bastante necesario que intentes comunicarte cada cierto tiempo. Infiltrate como es debido y ten la mayor precaucion que puedas. En caso de que te localicen o sospechen algo deshazte del colgante y escapa hacia el plano material de ser necesario.

Ciertamente para el hombre eran datos mas interesantes y curiosos de lo que realmente podria haberse esperado que la muchacha averigüase. Tenia intenciones de algo mas pero claramente no esperaba que le diese su ubicacion y un pase vip que dijese "corte las cabezas que desee".

- Cuando tengas noticias de que algun grupo intenta aventurarse en nuestro mundo haznoslo saber y estaremos preparados. Con eso bastara e intentaremos localizarlos. Si conoces la ubicacion sera lo ideal.

De repende un ruido se escucho, era la puerta del baño que estaba trabada y del otro lado claramente una voz.

- Olaff como seas tu de vuelta...

Era Malkav, medio dormido que parecia haber escuchado la voz de un hombre y asi adormilado como estaba no la habia reconocido.

-Tsk....- Si es que su padre tenía puntería para complicarle las cosas. Cerró el camafeo bruscamente. En parte estaba deseando hacerlo desde que el mismo empezó a hablarle. Destrabó la puerta del baño y enfrentó a Malkav.

-Bueno tu ganas... estaba preparandote una bromita para mañana pero me has pillado. Al menos ahora se que puedo confundirte con la voz si quiero.-

Dijo resueltamente, teniendose confianza de que estando el chico un tanto dormido, se lo terminaría por tragar.

-El baño es todo tuyo.. puedes pasar.-

Se hizo a un lado para que pudiese entrar y ella luego salir. No creía que la fuese a decir mucho más. Si estaba allí, posiblemente tuviese ganas de ir al baño realmente. No creía que la hubiese oído demasiado.

El muchacho asintio, casi fue como si no la viese en realidad pasando a su lado dandola una palmada en el hombro y comportandose como si ella fuese todo un hombre.

- Muy bueno Olaff... Gracias...


Dijo mientras que practicamente ya tenia los pantalones abajo. Empujo la puerta la cual no llego a cerrarse del todo y comenzo a abrirse lentamente mientras dentro se escuchaba como el caudal de agua empezaba a golpear el retrete.

- Uff que gusto...

Realmente ni se habia fijado, estaba practicamente dormido cuando paso al lado de ella. Sin si quiera darse cuenta de lo que hacia se abrocho el pantalon con aquel cordon elastico y regreso a la cama sin percatarse de ella.

Hombres... todos unos cerdos ¿Pero que podía esperar de la época medieval? Se habían quedado atascados en el tiempo, en las costumbres en su gran mayoría.
"Al menos no hizo en el cuarto en una charola" tenía que ver el lado positivo. "O en el agua mientras nos bañabamos.... ¿No lo hizo no?". Se estremeció y volvió a la cama un tanto más perturbada. Su padre le había quitado el sueño y la verdad es que la costaría volverse a dormir o descansar mucho más.

Dormiría hora y pico antes de que los otros comenzaran a levantarse.
Con un bostezo se desperezaría y protestaría un poco por haber dormido bastante mal a causa de aquel llamadito. Se encargaría de deshacerse del relicario lo antes posible. Si se podía lo destruiría inclusive. Quizás pudiese fundirlo...

Se lo quitó y de momento lo dejó enterrado en el fondo del baúl. No tenía ganas de llevarlo puesto y tampoco le parecía seguro a demás de que la distraía.
Sentía cierto picor, como si la hubiese dejado certa alergia.

-¿Enserio tenemos que ir tan temprano?.- Le rugió el estómago. Al final no había cenado nada la noche anterior entre una cosa y otra. Quería desayunar algo suculento pero no sabía si habría tiempo.- ¿Al menos podemos comprar algo para comer en el mercado? Me estoy muriendo...

Si, esa mañana estaba un tanto caprichosa y quejosa.
Se puso unas calsas, una blusa amplia, cinturón, faja, bolsita con la piedra y el dinero, botas y no mucho más.

Hyunkel debía de estar haciendo los mandados de Magda y su padre debía de estar avivando a los cazadores. No tenía ganas de insistir a sus nuevos compañeros de visitar el plano material... y ni hablar de decirle a Hyunkel ¿O quizás podía dejar que se diesen el gusto? Hyunkel quería matarlos, ellos querían matarlos... en fin. El humano, era humano pero aún así un enemigo.

Negó con la cabeza. No... tampoco quería enviar a Hyunkel al plano material. Ni siquiera quería regresar ella.

Malkav iba detras de ella llevaba las manos atras de la nuca y sonreia ampliamente mientras caminaba entrando justo en ese instante al distrito comercial mientras que Olaff habria camino y Rowen y la pixie iban delante de Aria justo, estaba claro que era mucho mas util tener un gigante que te abriese camino para aquellos lugares.

- Hoy estas un poquito niña ¿no? No te preocupes, prometo comprarte lo que quieras para desayunar.

Olaff observo por encima del hombro, esperando un golpe o algo similar, empezaban temprano en la mañana aunque el tenia pinta de haber descansado poco, el que parecia mejor era Rowen que estaba fresco como una rosa.

- A veces te mereces algun que otro golpe Malkav. Tu tambien eres rompe huevos a primera hora.

- Es que si no puedo comerlos yo mejor los rompo, ya me conoces soy un egoista.

- ¿Otra alusion a tu lado marica?

- Claro que si grandullon y cuando quieras te rompo los tuyos, deja ya el temita.

Olaff le sonrio aunque ciertamente dejo de lado todo el ausnto.

-Ya... comprame algo de comer o tendrás que cargarme porque terminaré por demayarme del hambre.- Si quería jugar así, jugaría así. Se adelantó unos pasós tomandose del brazo de Malkav para cargosearlo. Era más que evidente que lo hacía a propósito porque tiraba de él inculcandole su propio peso e intentaba fastidiarlo.- Si te portas bien prometo que no hablaré tan mal de ti esta noche No es que realmente fuese a hacerlo, pero igual le picó.

Pasaron junto a un puesto que vendían manzanas caramelizadas y justo a unos tres puestos de distancia había amuletos. Para llegar a la armería aún les faltaba recorrer un poco del mercado y en cuanto a los pergaminos de magia... bueno, había algún que otro pergamino en puestos varios, nada muy ordenado.

La pixi de Rowen no estaba. Quizás estaría tomando en consideración el beberse o no la poción que ella le había obsequiado.

Aria soltó del brazo a Malkav al llegar al puesto de manzanas, tras haberle frenado de un tirón.

-¿No te apetece una también a ti?.-

El de la tienda se rió un poco de la situación y casi compadecido por el chico, le obsequió una a la muchacha.

-Parece que tu novia tiene un poco de hambre.-

-¿La novia de quien?.- Preguntó una mujer de pelo blanco que apareció de repente. Quizás los había estado siguendo. Tenía amarrada al cinturón una espada y llevaba los brazos cruzados. Lucía una armadura que comprendía hombreras, rodilleras, botas y muñequeras a demá de una pequeña porción que hacía de corpiño por sobre la tela de una blusa la cual tapaba levemente un pantalón largo.

El muchacho observo la imagen de quien tenia delante vendiendole claramente la manzana suponienod que se la pagaria, claramente iba a hacerlo aunque estuviese colgada de su brazo. Entonces escucho aquella voz y se le helo la sangre, un sudor frio recorrio su espalda, claramente habia reconocido aquella voz. En ese momento Malkav llevaba una camisa de mangas amplias y un chaleco marron que conjuntaba con sus botas, su pantalon era de un azul oscuro.

Olaff por su parte traia tan solo un chaleco y se podian ver sus musculos bajo el mismo. El muchacho debido a su complexion tenia una temperatura corporal alta y aunque fuese invierno el no necesitaba mas alla de una camisa por el frio.

- A-A-A...

No llego a articular las palabras cuando se le cayeron las monedas necesarias para pagar al tendero.

Aria no pudo más que romper encarcajadas.

-Si lo dice por mi no soy la novia.- La idea se le hacía tan graciosa que a penas podía sujetar la manzana y limpiarse las lagrimas a la vez. Estaba segura de que Olaff y Rowen también se lo tomarían a risa porque era una idea más que ridícula ¿O no?

También reconoció a la peliblanca, a la cual sonrió con suavidad y saludó.
-Buenos días.-

-Buenos día a ti también.- Complacida con la respuesta que había escuchado, supiese uno por qué, la mujer se agachó para recoger una a una las monedas que se le habán caído a Malkav. Se las dio al vendedor y sonriente, posó la mano sobre el hombro del Fuath.

-¿Debo recordarte que tirar cosas en la acera pública pueden conllevar a un severo castigo?.- Dijo de forma muy seria para luego reirse y palmearle el hombro. Evidentemente se divertía mucho mortificando al muchacho porque realmente parecía que él le tenía terror.-

-En fin.. ya que parece que no tienes novia ¿Qué tal llevarme a mi al baile?.- Antes de que pudiese contestarle algo terminó la charla.- Puedes recogerme por mi oficina. Será mejor que vengas tu porque si tengo que ir yo... pufff... quizás no pase por alto la infracción entonces.- Claramente no había ninguna infracción pero si le apetecía podía inventarselas.- Que tengan buenos días chicos. Nos vemos por la noche. Hasta más tarde Hornwood.-

-Uhhh creo que tendrás que romper muchos corazones... parece que no te ha quedado elección.- Le susurró al oído mientras la muchacha se marchaba.- Pero descuida, apreciamos tu sacrificio por el bien del linaje. Estás haciendo lo correcto.- Empezó a comerse su manzana.

Malkav realmente habia quedado impactado y durante todo el proceso en el que estuvo presente la mujer mientras que el tendero no entendia practicamente nada aunque estuvo simplemente contando las monedas si que reconocio a la mujer que tenia delante.

- No pasa nada señorita Araiel, seguro que Malkav estara orgulloso de recoger las cosas que ha tirado.

Dijo mientras observaba las situaciones que tenia delante, Rowen particularmente no reacciono a la aparicion de la guardiana del orden. Antes de darse cuenta termino por decir aquello en el momento, cuando la señorita se habia ido entonces pudo hablar.

- Listo, mi vida social a terminado completamente y tan solo me toca ser dominado por una mujer completamente autoritaria y mucho mas poderosa que yo en una posicion...Un momento... JAJAJAJA esto es fantastico, quizas hasta nos servira por lo social, no solo a mi sino al linaje.

La verdad que si de algo estaba seguro es que iba a ser una reunion de lo mas segura y variada la reunion.

Se secó las lágrimas y acercandose a los otros dos chicos, sin pelos en la lengua les dijo lo siguiente tras recuperar el aliento y la compostura.- Por favor... no dejen que nunca olvide la noche de mañana. Estoy segura de que se será para rememorar.- Posiblemente aunque fuese la cita de Hyunkel, se divirtiese viendo a Malkav a la distancia. Estaba de lo más segura de que Araiel terminaría por poner incómodo al chico porque ya era la segunda vez que veía a la joven y la reacción de él siempre era la misma. Nervios absolutos.
-Bueno, parece que te han puesto la correa pues ¿Hacemos las compras antes de que le pongan el collar y tengamos que pedir permiso para sacarlo de paseo?-

Se adelantó un poco dandole un nuevo mordisco a su manzana la cual ya estaba empezada. Los primeros puestos eran de telas, chucherías varias, sogas de todos los tipos y tamaños. Se detuvo en este último tipo de puesto y soltó comentario al aire.- Deberíamos de comprar un par.-

Se quedo pensando por unos momentos aunque despues se encogio de hombros ante la situacion que le esperaba a futuro. A fin de cuentas tendria si o si que adaptarse a lo que fuese necesario. Rowen la lanzo una sonrisa, sorprendentemente estaba sin la pixie esa mañana, aunque comprendio a la perfeccion las palabras de Aria.

- No te preocupes, me encantaria poder grabarlo en mi memoria y acceder a ello cada vez que quisiese. Sera epico.

Dijo Olaff dandola la razon mientras le daba la razon a la muchacha riendose tambien levemente por los motivos que estaba viendo a futuro.

- Bueno centremonos un poco en obtener lo que necesitamos. Primero los pergaminos para las niñas. Despues la armadura.

Dijo el Fuath mientras que caminaban hacia adelante entrando a una tienda bastante roñosa. Poco despues tomo lo que venia a ser una manta y el dueño lo observo, la hizo un lado ya que sabia de aquello.

- Pasen si conocen esta seccion es porque saben de que hablan o son de la torre.

Ya que la habían ignorado olimpicamente respecto a comprar sogas, ya compraría ella en otra ocasión. La parecían absolutamente necesarias y no algo de lo que hubiese que pasar por alto.

Entró a la tienda de pergaminos siguiendos a los otros tres. Había tenido acceso a muy pocos pergaminos de su magia en su vida. Los cazadores de antaño habían eliminado todo ese tipo de material. Recién los cazadores de hace unos cuantos años habían empezado a recolectar dicho material sin someterlo a fuego.

Parecía estar todo divivido de forma sistemática y ordenada. Sabía o al menos intuía que los pergaminos de magia más elevada no deberían de estar expuestos o al alcance simple de todos pero no fue ella quien preguntó si había algo más en la trastienda. Se limitó a observar lo que si había a la vista.

Había magia elemental, magia blanca, negra, pergaminos para nigromantes, de todo un poco. Cada uno de esos rollos tenía un sello de lacre con el símbolo de un elemento o una clasificación y pendía de dicho símbolo una pequeña etiqueta de papel la cual estaba escrita en diferentes idiomas.

Reconoció el símbolo aquano pero no entendió qué decía la etiqueta. Ella no hablaba aquano.

Tomó un pergamino con el lacre de Faeris. No entendía faerico pero si sabía que el elemento natal de aquel plano en antaño había sido el Fuego. Si bien ahora era un plano gobernado por las Lumias y los Faericos de sangre eran casi un mito, la magia de fuego no era una magia que muchos llegasen a dominar por el simple hecho de que los maestros de ese elemento estaban extintos. Se rumoreaba que había algún que otro esclavo natal recluso en Faeris pero si era así, daba igual porque de seguro nunca tendrían acceso a ello.

O el pergamino estaba traspapelado o era magia de fuego muy básica. Buscó a ver si algo indicaba el nivel de aquel rollo y como no lo encontró se acercó a Rowen para pedirle ayuda ya que al tendero no lo vio por ningún lado.

-¿De qué nivel crees que sea este rollo?

Rowen se encontraba en ese momento mirando varios pergaminos de artes mixtas que simplemente leyo por encima para cotejar su contenido hasta que el chico recibio la pregunta de la muchacha. Se acerco levemente y observo con los ojos detenidamente su contenido.

- Diria que es un nivel intermedio. Basicamente te enseña a controlar e invocar de la nada el fuego sin tener que recurrir al calor corporal propio sino usando lo que hay alrededor como una fuente. Entre otro lo mas interesante es que te enseña que el sol es lo que siempre vas a poder usar estes donde estes y que aunque largos de conjurar los hechizos del grupo son los mas destructivos. Tambien te menciona dos tomos anexos que quizas podria tener este librero que son hechizos mas en detalle como manos ardientes, barreras y escudos varios. Y por lo que veo espadas en llamas y como desarmar al enemigo con ese mismo hechizo, muestra dos aplicaciones. Es interesante.

Dijo mientras que Malkav observaba varios pergaminos, en su caso estaba fijandose en varios hechizos de tierra que sin lugar a dudas habian dejado su mente bastante centrada.

- ¿Ven algo que les interese? ¿Puedo orientarles?

-Pues entonces creo que me lo voy a llevar y que tu y yo pasaremos varias horas donde me enseñaras algo de faerico.- No era una pregunta, era un hecho. No importaba si le enseñaba gratis o tenía que hacer un trueque por algo que a él le interesara. Si en ese pergamino estaba escrito el como usar la magia de la forma que le había dicho, entonces lo quería y quería aprender a usar dicha magia. Para una correcta interpretación, al menos debería de aprender esa lengua de forma básica.

El tendero apareció y ella le enseñó el pergamino.

-Si.. nos vamos a llevar este en concreto y si tiene algo más del estilo en base a magia de fuego me gustaría nos mostrase el material disponible. Mis compañeros siguen eligiendo.-

Dijo pues Malkav parecía aún demasiado centrado.

- Por supuesto señorita, sigame por aqui.

Rowen se quedo un poco sorprendido ante el hecho de que la muchacha le diese una orden, normalmente no habian hablado absolutamente nada de nada de todos los temas que habian estado manejando pero sin lugar a dudas parecia que ahora iba a tener que pasar tiempo con ella.

- Creo que podemos hablarlo con Pix. Seguro que querra echarte una mano tambien. En parte es su idioma mas que nada.

Dijo mientras la seguia alli a donde iba. Malkav aparecio al momento con unos cinco pergaminos variados.

- Me voy a llevar estos. Crecimiento acelerado, bloques que chocan, hermanos de piedra y el pinaculo. Para la muchacha lo que le pida y este que traigo, artes de curacion basicas.

El tendero observo los libros y el ultimo le sorprendio un poco.

- ¿sera usted sanadora?

-Si, una sanadora poco atípica, pero si, es la intención.- Sonrió de forma amable al tendero mientras Rowen la seguía. La verdad es que la sorprendía que la Pixie fuese de ese origen. Se la imaginaba más ligada a la luz del sol en general que al fuego.
-Por mi encantada, aunque sigo sin saber como te logras comunicar con ella de forma tan fluida. Me cuesta entenderla cuando no es por señas o gestos.- Le dijo, lo cual le debía de pasar igual tanto a Malkav como a Olaff.
-¿Qué idioma habla?
Siguieron al tendero a la trastienda mientras que Malkav se quedaba con su botín y ella seguía aferrada a su pergamino no fuese cosa de que el dueño de tienda se arrepintiese y se lo quitase de la venta. Era algo demasiado preciso y bastante particular.